Texto para el reto el teatro.
El reto viene de la mano de Merche en su blog Literatura and Fantasy.
Requisitos internos: Debe versar sobre el teatro, sobre actores ensayando, sobre una obra en concreto, sobre lo que significa el teatro, sobre la vida escénica, etc.
Escena inspirada en la obra teatral Luces de Bohemia de Ramón María de Valle Inclán.
Lugar en el que se desarrolla la acción: Un confesonario de una iglesia barroca.
Se abre el telón.
(Aire de cueva y olor a rancio. En el interior del garito, lóbrego, oscuro y misterioso, se mueve el bulto de un hombre. Un vejete, con sotana de luto raído, hundido en la silla enana, con los pies entrampados. Tose cavernoso. La tos clásica del tabaco y del aguardiente de don Latino. Una sombra en las sombras del cubículo.
La señá Dolores se acerca desgreñada y con la falda pingona. La pregonan el resuello y sus chancletas. Se postra ante la rejilla).
Don Latino: ¡Salutem plúriman! (Dice mientras con una mano corre el cortinillo de verde sarga).
La señá Dolores: Ha ocurrido algo espeluznante que me ha hecho extravagar. Porque en vez de cantar el gorigori, me he alegrado con toda mi jeta de la muerte del dictador ruso.
(El cura escucha con el cuello torcido y los quevedos pendientes de un cordón como dos ojos absurdos bailándole sobre la panza).
Don Latino: Estás hablando de manera desbaratada, Dolores, sin orden ni concierto. Eres una botarate.
La señá Dolores: Pues en el Callejón del Gato no se habla de otra cosa.
Don Latino: Pero ¿qué has oído?
La señá Dolores: Pues que le han dado mulé. El coche ha volado por los aires, convertido en una bola de fuego, con el finado dentro.
Don Latino: Bueno, bueno. La culpa es mucha, ¿sabes? Disfrutar del mal ajeno es una maldad que raya el pecado mortal. Reza en penitencia un padrenuestro y ahueca que tengo prisa.
La señá Dolores: ¿Solo un padrenuestro? (Se le tuerce el gesto, contrariada).
Don Latino: En la oración no importa tanto la cantidad como la intención.
(Saca una mano regordeta de entre los pliegues de la sotana y la eleva en un gesto rápido de absolución. La misma mano nerviosa empuja la puerta del confesonario que se abre con un largo chirrido. El vejete sale de la tiniebla del cuchitril con aire torpón y, acezando, se dirige al público).
Don Latino: Se acabaron las confesiones por hoy. Tengo que ir a la taberna de Pico Lagartos. Las noticias llegan allí antes que al confesonario. La vida es un esperpento.
Cae el telón.
Abrazos.
ResponderEliminarAbrazos, Fiaris.
EliminarAaalaaa! Y no precisamente del avión en el que te has instalado para volar por la blogosfera, ala! de sorpresa por el nuevo formato de tu blog ¡muy chulo! hasta creí que me había equivocado .. y luego por si fuera poco nos metes de cabeza en el mundo del Sr. Valle Inclán, pero ¿cómo te has cogido al carcamal de Don Latino y no al entrañable Max? Bueeeno… a decir verdad has retratado perfectamente el ambiente, el estilo y hasta el aire de los personajes…tiene muchísimo mérito lo que has hecho, nada más complejo que escribir una obra de teatro… solo falta que se haga verdad y que el ostrógodo ruso ese y todos los empecinados en esa guerra absurda, vuelen por los aires…eso sí, después me buscas otro confesor porfa ; )
ResponderEliminarUn abrazo muy muy fuerte dramaturga genial! ; )
Hola, María, con el carcamal Don Latino, me atrevo. Con el entrañable Max, no. Lo admiro demasiado y lo respeto. Qué expresiva eres. Me has hecho reír. ¡Ja, ja, ja! Lo de buscarte un confesor... Si encuentro uno que merezca la pena para ti, te lo presento.
ResponderEliminarUn abrazo, preciosa.
Y el aplauso del público, después de disfrutar de un espectáculo muy bien dirigido con unos exteriores y localizaciones magníficos. Abrazos
ResponderEliminarGracias, Ester. Un abrazo!
EliminarMe gusto mucho el relato Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias, Citu. Un beso!
EliminarMe ha encantado tu participación, María Pilar.
ResponderEliminarYo también voy a necesitar ese confesor.
Un abrazo.
Hola, Chema, Don Latino da para mucho. Lo mismo tima a su amigo Max, que se va con una prostituta, o se mete en un confesonario. Con la boca pequeña te digo que no es de fiar.
EliminarUn abrazo!
Hola María Pilar: genial, verdaderamente genial. No solo nos recuerdas esta gran obra de la literatura, sino que encima recreas el lenguaje, la atmósfera y hasta los personajes. ¡Muy bien logrado! También me has hecho tener esperanza con la cruel muerte de cierto dirigente, al que no quiero nombrar por si sus esbirros nos cierran el blog, a ti y a mí, aunque creo que están más preocupados por otras cuestiones, pero por si acaso porque con esa calaña cualquier cosa te puedes esperar.
ResponderEliminarEn cuanto a los personajes, me ha gustado más la señá Dolores que Don Latino, creo que es la que lleva el peso del micro, Latino solo se adapta a sus palabras, aunque el final suyo es contundente.
Lo dicho, muy bien logrado, me ha gustado, te felicito por él.
Muchas gracias por participar.
Un abrazo. :)
Hola, Merche, me alegra que te haya gustado. No suelo mirar las estadísticas de seguimiento de mi blog, pero hace poco las miré y en el número uno estaba ese país.
EliminarUn abrazo!
Genial tu participación Pilar, me ha gustado mucho.Ojalá y esos locos de alma y corazón salgan volando hacia un abismo donde no puedan volver. Un placer venir a tus letras e imaginación. Besos amiga
ResponderEliminarHola Maria Pilar, que gracia me hizo lo del gorigori... Doña dolores maneja el desarrollo con perfección, al igual que tu con el microrrelato. Me ha encantado. Bravo!! Un abrazo
ResponderEliminarHola María Pilar, muy buena escena y ese final de carcajada, un excelente microrrelato. Gracias, abrazo
ResponderEliminarHola Maria Pilar, un gusto leer tu participación para el reto de Merche. Saludos y enhorabuena por un gran trabajo.
ResponderEliminar¡Hola, Mª Pilar! Me encantó eso de que las noticias llegan antes a la taberna que al confesionario. Una pieza teatral muy bien narrada, usando ese lenguaje de época y ambientando perfectamente la escena.
ResponderEliminarTambién logras darle voz propia a cada uno de los personajes, además de conseguir que el lector vea la motivación de cada uno. El cura, otro día más en la oficina, la señá, a quien la penitencia le sabe a poco en comparación al pecado que según ella ha cometido. Estupenda participación en el reto de Merche. Un abrazo!!
Me encanta Luces de Bohemia, es una maravilla de principio a fin. Tuve la suerte de verla hace muchos años casi en primera fila y con el number 1 del teatro español de aquella época: José María Rodero:
ResponderEliminarMe gusta tu historia, has pillado la sicología de los personajes de Valle, y me parece muy grande el estoque final.
Un día habría que hacer recuento de los grandes finales de historias.
Un abrazo. Mucha suerte en el envite
Hola María!
ResponderEliminarJaja qué rato más grato me has hecho pasar. (La risa es porque me hizo mucha gracia el "gorigori"). La verdad, y hablando como en tono teatral, SE TE NOTAN LAS TABLAS a la hora de escribir. Esto en particular, ha sido muy ameno.
Te mando un abrazo y un beso. 🌹
preparada para ver lo que te ha encantado abrazo desde Miami
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