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La busca



Ficha técnica Editorial: Cátedra
Fecha de edición: 1 de mayo de 2010. 
ISBN: 9788437626673 
Encuadernación: Tapa blanda. 
N.º páginas: 472 
Materias: Narrativa.




La busca 
es la lucha por la existencia de los vencidos desde los fondos más bajos de la sociedad. Los llegados a la ciudad del mundo rural para buscarse una vida mejor. El libro destila amargura. Siempre se puede caer más bajo, salir del arroyo parece imposible. A pesar del famoso pesimismo barojiano, ¡cuánto amor por la vida! De fondo, una crítica a dos temas inherentes en la vida de las ciudades modernas. Por una parte, las clases acomodadas y, por otra, los que viven en la miseria nutriéndose del basurero que los primeros crean. Para nada aparece el poder político constituido; el gran poder es el del dinero. 

El título, La busca, indica una forma de vida. La que trata de sobrevivir, de resolver lo inmediato. “Aquí no viven más que los de la busca, rondas y prostitutas” (p. 133). 

En realidad, no constituye una novela como tal. Nos va presentando cuadros de personajes con los que se va encontrando Manuel, el protagonista, en su “buscarse” la vida, pero sin que lleguen a formar parte de un entramado en el discurrir de la obra. Un enjambre formado por la terrible vida de la gente de la calle, marginados y golfos de la sociedad madrileña de finales del siglo XIX. La historia es estremecedora por la carga de realismo del malvivir en el cinturón de miseria del sur de Madrid. En contraste, la luminosidad natural de los amaneceres y atardeceres impasibles a todo lo que les rodea. Solo hay dos descripciones que se asocian a momentos particulares de la novela. Al comienzo de la misma, cuando Manuel llega a Madrid, al bajar del tren, siente una “verdadera angustia” (p. 23). Y en ese momento “un crepúsculo rojo esclarecía el cielo, inyectado en sangre como la pupila de un monstruo” (p. 23). Y el final desesperanzado de la obra coincide con un prometedor amanecer que le da un giro para dejarlo en un final abierto.
 
Son muy importantes las descripciones de las viviendas en la novela, a través de ellas vamos viendo la degradación de los personajes que van bajando de nivel social. El vivir sin intimidad es una marca de esta clase social de la gran ciudad y a la vez estar en la más absoluta soledad. Como le pasa a Manuel, con las expulsiones que padece, llega a juntarse con los que viven en la calle. Otros, como el Bizco y sus amigos, lo hacen en cuevas en la montaña. El Corralón muestra el tipo de vivienda más modesta donde vivían las familias hacinadas, o, ya con más comodidad, la casa de huéspedes de doña Casiana.
 
Destaca la riqueza lingüística con el humor socarrón y la fina ironía del autor. Nombres de establecimientos grandilocuentes: A la regeneración del calzado. Barbería modernista, en plan burlesco. La descripción minuciosa, las palabras pintorescas en cursiva o las observaciones sarcásticas son elementos que componen el universo de Pío Baroja. También el uso del argot, el lenguaje entre las personas de los barrios bajos de la sociedad madrileña.
 
En resumen, La busca es una obra imprescindible para cualquier amante de la literatura española y el libro adecuado para conocer el universo barojiano. Publicada en el 1904, es impresionante por la crítica social y política de la época; con una historia emocionante y conmovedora de  la vida de los personajes.

Pío Baroja es un destacado escritor y novelista español. Nació el 28 de diciembre de 1872 en San Sebastián y falleció en Madrid el 30 de octubre de 1956. Es uno de los escritores de la generación del 98. Estudió medicina en Madrid, pero pronto abandonó la práctica médica para dedicarse por completo a la escritura. Su obra se caracteriza por su estilo ágil y directo, sus personajes complejos y su crítica a la sociedad española. A lo largo de su vida, Baroja escribió más de cincuenta novelas, muchas de las cuales están agrupadas en trilogías como La lucha por la vida y «El mar».

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